Donostia/San Sebastián servirá de modelo para la implantación de un proyecto que contribuya a analizar y mejorar la habilidad de las ciudades para afrontar grandes crisis que afecten a áreas urbanas en materia de cambio climático, energía y ámbito social, entre otros.
Durante los próximos cuatro días, las ciudades que forman parte del proyecto abordarán a través de talleres y el trabajo en grupos, las infraestructuras críticas.
Dentro de este grupo se encuentran las comunicaciones (redes, TICs, ciber seguridad), suministros (agua, electricidad…), transporte, transporte de mercancías peligrosas, emergencias (inundaciones, incendios…), seguridad y otras.
Cada una de las ciudades expone sus niveles de resiliencia y sus capacidades de adaptación. Para ello, tienen que detallar entre 3 y 5 hitos que han puesto a prueba a la ciudad en los últimos diez años, entre otros muchos aspectos.
TECNUN-Universidad de Navarra y el Ayuntamiento de Donostia/San Sebastián a través de la Oficina de Estrategia colaboran en este proyecto financiado por la Unión Europea para el desarrollo resiliente de las ciudades que se desarrollará en los próximos tres años.
El concepto de resiliencia se refiere a la capacidad de las ciudades, en este caso, para evitar sufrir crisis, disminuir su impacto en caso de padecerlas o reducir el tiempo y los recursos necesarios para volver a la normalidad tras haberlas padecido.