El Ministerio creó este galardón y la Red de ciudades Innpulso en el año 2010 para reconocer e impulsar las actuaciones que en materia de Ciencia e Innovación realizan las Administraciones Locales, propiciar la colaboración entre los Ayuntamientos y contribuir al cambio del modelo productivo basado en el conocimiento y la I+D+I, y la labor de Donostia / San Sebastián ha sido reconocida de forma continuada desde la primera edición hace ya 15 años.
La oficina de Estrategia de Donostia / San Sebastián, en colaboración con la Sociedad de Fomento de San Sebastián, ha sido la encargada de promover la renovación de la candidatura donostiarra que ha recibido la adhesión y apoyo de cerca de cincuenta entidades públicas y privadas de sectores como las neurociencias, las nanociencias, las biociencias, la energía, las tecnologías de la información y la comunicación presentes en la ciudad.
Tres décadas de trabajo
El primer Plan Estratégico de 2001-2010 de la ciudad apuntaba como uno de sus ejes estratégicos la apuesta por la ciencia y la innovación, y marcaba como objetivos generar infraestructuras e implantar centros de investigación que potenciaran las tecnologías de la salud en la ciudad. Esa clara determinación y la labor realizada durante los primeros años fueron aspectos clave a la hora de sostener dicha apuesta en los futuros planes estratégicos 2020 y 2030, donde el desarrollo científico de la ciudad ha sido una de las prioridades.
En 2017, Donostia / San Sebastián fue considerada la primera ciudad del mundo en el ranking de ciencia colaborativa por la revista Nature y una de las 200 ciudades científicas más importantes del mundo gracias a su amplia red de centros de investigación. Según señala Cotec en su último estudio, “San Sebastián es la capital española con mayor peso del empleo ligado a la I+D, con un 2,34% del total, lo que supone 2.280 profesionales en el municipio dedicados a investigación y desarrollo”. Esa proporción sobre el conjunto de las personas trabajadoras era de un 1,57% en el año 2016, lo que da también una idea del progreso en este ámbito y de la velocidad del mismo en los últimos tiempos.
Además, tal y como dio a conocer el Ayuntamiento de San Sebastián, a través de Fomento de San Sebastian, en febrero de este año, la ciudad genera 277 millones a través de la ciencia y la innovación, y el sector tiene una repercusión del 3,6% en el PIB local, lo que representa una cifra superior a la media de la Unión Europea.
Entre los principales proyectos a corto plazo, destaca el superordenador cuantíco de IBM que se instalará durante el segundo semestre del 2025 en la ciudad.