La primera jornada del encuentro ha servido para conocer las diferentes estrategias y planes de acción sobre las que están trabajando las ciudades. En la primera mesa han intervenido el director de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Donostia / San Sebastián, Josu Benaito; el jefe de la Unidad Técnica de Ciudad de Mar de Las Palmas, Andrés Caballero; y el Teniente de Alcalde y Concejal de Presidencia, Relaciones Institucionales y Turismo de Santiago de Compostela, Gumersindo Guinarte. Benaito, por su parte, ha destacado los cuatro ejes principales sobre los que está trabajando Donostia en el marco de la Estrategia KLIMA 2050: la movilidad, la energía, el territorio y la economía circular. Y ha hecho hincapié en la necesidad de movilizar a la ciudadanía, más allá del trabajo de concienciación. Caballero ha alertado sobre las consecuencias que el aumento del nivel del mar tendrá en La Palma, puesto que podrían perder el 11% del PIB y 74 playas de la isla, que precisamente, son un importante reclamo turístico y motor de la economía.
En el caso de Santiago de Compostela, Guinarte ha presentado el proyecto de movilidad pionero que están desarrollando: la creación de un centro logístico de distribución urbana en las afueras de la ciudad y próximo al casco urbano, que mejorará el acceso de los vehículos de reparto que acceden al mismo, para abastecer a los establecimientos de hostelería y comercio. “Queremos convertir la zona en un espacio de 0 emisiones, y contemplamos la opción de extender el modelo al resto de la ciudad”.
Neutralidad y decrecimiento
La segunda mesa de trabajo ha estado formada por el presidente del Comité de Acción por el Clima y Consejero del Ayuntamiento de Cork, Oliver Moran, el director general de Medio Ambiente de A Coruña, Jesús Fernandez, y la alcaldesa de Gijón, Ana González. Moran ha hablado sobre el objetivo de conseguir la neutralidad en emisiones de carbono para el 2030. “Desde que hicimos la declaración de emergencia climática, hemos trabajado de forma contundente mirando al futuro. Somos una ciudad vanguardista en este aspecto, y creemos que somos capaces de coordinar políticas hacia un objetivo común”.
Fernández, en cambio, ha explicado las diferentes medidas que se están tomando en A Coruña para, entre otros objetivos, reducir las emisiones de ciertos gases y conseguir una mayor eficiencia lumínica. Además, ha recalcado la importancia que tiene la pedagogía en este tema, puesto que el trabajo continuo y las estrategias a largo plazo pasan por la educación y la formación de las nuevas generaciones. “Los niños y niñas son fundamentales para el cambio y serán ellos y ellas quienes conseguirán que las decisiones actuales se puedan llevar a cabo”. Finalmente, González ha puesto el foco en la necesidad de redefinir el concepto de crecimiento y empezar a asimilar el cambio de paradigma para entender que el progreso implica decrecer. “A pesar de todas las medidas que se están tomando desde las instituciones, los indicadores siguen empeorando. Y es muy importante hablar con la ciudadanía, no sólo de propuestas concretas, sino de redefinir el bienestar y el confort, y empezar a trabajar de forma colaborativa, para mejorar los resultados y poner en marcha proyectos más consistentes”.
Proyectos culturales
Durante la sesión de la tarde, los y las representantes Donostia / San Sebastián, Brest y Viana do Castelo han presentado tres proyectos culturales con el objetivo de proponer iniciativas colaborativas y conocer las diferentes experiencias de éxito que están desarrollando cada una de ellas. Han intervenido la directora del Museo Chillida Leku, Mireia Massagué; el jefe de Planificación Espacial, Cooperación Territorial y Marítima de Brest, Tristan de Penanros; y el vicepresidente de la Cámara de Viana do Castelo, Manuel Vitorino.
La jornada del miércoles comenzará con la ponencia de María José Sanz, directora científica del BC3 Basque Centre for Climate Change, sobre el impacto del cambio climático en las ciudades atlánticas, y a continuación se celebrará la mesa de alcaldes y alcaldesas bajo el título La transformación de las ciudades atlánticas derivada del cambio climático. La Asamblea General posterior terminará con la firma de la Declaración de Donostia / San Sebastián, manifiesto en el que las ciudades de la red se hacen eco del llamamiento internacional para hacer frente al cambio climático y se comprometen a acelerar la puesta en marcha de medidas destinadas a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.