¿Te sorprendió ser elegida por sorteo para representar a la ciudadanía donostiarra en el consejo social?

Pues la verdad es que sí, fue toda una sorpresa. Siendo sincera, apenas había oído hablar de él, y me veía incapaz de aportar algo a la Comisión Permanente desde mi posición. Sin embargo, desde el primer momento que dije que sí, me volqué en ello y una vez comprometida, intentaré dar todo lo que pueda de mi parte como representante de la ciudadanía.

Vives en Donostia / San Sebastián desde hace 5 años. ¿Cómo ves la ciudad? 

Antes de venir a vivir aquí, Donostia la veía como lo que es: una ciudad preciosa, y a la que me gustaba venir siempre que podía. Después de 5 años, la perspectiva quizás es algo diferente. Sigue siendo una ciudad preciosa, pero se ven otros aspectos que desde fuera no se aprecian tanto. Me parece que tiene una calidad de vida muy buena, y muchos aspectos positivos, pero también creo que está tendiendo a masificarse a nivel turístico y, bajo mi punto de vista, se están dejando un poco de lado las necesidades de la ciudadanía. Cuando oyes hablar a tus propios convecinos y convecinas de que en temporada alta prefieren evitar varias zonas de la ciudad debido a la masificación, no puede ser buena señal.

En comparación con tu lugar natal, ¿qué aspectos diferenciales encuentras?

Tanto Donostia como Bilbao me gustan mucho, sin embargo, no tienen nada que ver. Donostia es más tranquila, y todo lo tienes al alcance de la mano. Sin embargo, creo que se deberían fomentar más las actividades culturales. Tenemos el Kursaal, el teatro Victoria Eugenia, el Teatro Principal, etc, y creo que se les saca poco partido. Mucha gente se va a las ciudades próximas a Donostia para buscar alternativas de ocio porque aquí no las encuentran. Por otro lado, el tema del comercio y el ocio, como el cine, se está concentrando en el centro comercial Garbera, y las conexiones y sus horarios son muy limitados.

¿Donostia es una ciudad abierta para el que viene de fuera?

Sí, bastante abierta. Yo en ningún momento me he sentido fuera de lugar, y además, en los barrios suelen haber muchas asociaciones vecinales abiertas a nuevos participantes. Esto siempre ayuda a conocer a tu vecindad.

Si fueras la alcaldesa, ¿qué cambiarías de la ciudad? 

Para empezar, es muy complicado ser alcaldesa en una ciudad tan grande como Donostia. Pero creo que hay temas que están olvidados y habría que darles una vuelta. Así como el descontrol que hay de las motos que aparcan donde sea (vivo al lado del estadio de fútbol Reale Arena y en días de partido es una locura absoluta).  Como ya he dicho, intentaría buscar turismo de calidad, y para ello, habría que controlar más el uso de las viviendas turísticas así como el precio de la vivienda. Es una pena que los jóvenes que están buscando su primera casa no puedan quedarse en Donostia, ya que los precios están totalmente por las nubes. Al final, la media de edad de la ciudadanía es muy alta, ya que la juventud se tiene que ir al extrarradio.

¿Y qué temas podría tratar el Consejo Social?

Somos muchos organismos diferentes los que formamos el Consejo Social, y ello le da un punto de vista diferente a cada uno de los temas a tratar. Por tanto, es complicado basarlo en algún punto en concreto… Por mi parte, podría hablar de temas que me competen, así como la vivienda, el aparcamiento, las necesidades sociales, etc. A fin de cuentas, si queremos mejorar nuestra ciudad, es necesario que exista este órgano llamado Consejo Social.

Para terminar, ¿algún otro aspecto que quieras destacar?

Me gustaría comentar que la ciudad no está apoyando suficientemente a los diferentes grupos deportivos que gozan de gran popularidad, sin ser los más conocidos, como por ejemplo, la esgrima, el kempo, etc. Son grupos con mucha implicación en diferentes eventos culturales de nuestra ciudad, pero la falta de facilidades por parte del Ayuntamiento a veces ahoga o los mantiene en el anonimato. Como veis, los temas a tratar son innumerables, y buscar una respuesta a todos estos retos es una tarea ardua.